Semana Santa en Caimito

Tradición, Reflexión, Descanso y Reencuentro

Estamos próximos al inicio de la semana mayor en Colombia y esta es utilizada por algunos para reflexionar, otros para afirmar su fe católica y otros para  descansar de la rutina laboral. Son muchos los  sitios del territorio nacional escogidos para estos menesteres, generalmente los que viven en el interior se desplazan a  la Costa Atlántica y viceversa, generándose un flujo de viajeros a todos aquellos sitios importantes de peregrinación con influencia religiosa o lugares turísticos para descansar de la rutina diaria.

En Caimito Sucre podrás encontrar la combinación perfecta para alternar lo espiritual, religioso, reflexión y el esparcimiento. Para esta semana santa  existe una programación que ha sido tradicional en el pueblo y que es el resultado de experiencias anteriores combinadas con las nuevas tendencias en materia  religioso espiritual y que a través de los años se ha consolidado en nuestra  parroquia convirtiéndose en una tradición admirada por propios y visitantes. Comienza con la tradicional misa de domingo de ramos donde los nativos y visitantes asisten con un ramo de palma de cera para que sea bendecido por el párroco en conmemoración de la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén.

Continúan las homilías y actos litúrgicos a lo largo de la semana con actividades como procesiones, actos como La  Dolorosa, El señor Caído, Las Estaciones en el camino al calvario con representación en vivo por habitantes del municipio, la famosa misa de medianoche o de gallo que le llaman y así hasta llegar a la misa del domingo de resurrección, programa suficiente para reflexión e interiorizar en nuestras vidas con respecto al mundo de hoy.

Pero si no se es tan religioso o espiritual y su deseo es tener momentos de esparcimiento y tranquilidad, en Caimito puedes contagiarte con la tradición de visitar a amigos, familiares o conocidos que viven o habitan en corregimientos o veredas del municipio, donde serás acogido por el simple hecho de ser visitante; ahora si eres familiar con mucha mas razón.

De lo primero que debes disponer, es de un buen estado físico para caminar, tener una moto, una bicicleta o cualquier medio de transporte y  planear una visita  al Mamón, La Solera, Siete Palmas, Los Cayitos, Nueva Estrella, Tofeme, o Puerto de Cuba.

Lo segundo es tener un buen estomago donde disponer los manjares que preparan los nativos y que son ofrecidos de manera gratuita a quienes les visitan ya que son platos tradicionales propios para la fecha, como un guiso de hicotea, un mote de Bagre, un estofado de Bagre, un mote de Palmito, una viuda de bocachico salado servido en hojas de plátano o sencillamente un plato con bocachico frito, arroz de coco, patacones y ensalada.

Si aun le queda un espacio en su estómago prepárese para degustar de postre un platillo con dulce de leche, dulce de ñame, dulce de palmito, de frijol, de papaya o cualquier fruta que esté en cosecha y todo esto acompañado de un vaso de chicha cortada con raíces de maíz biche o batata, que no falta en los hogares caimiteros y todo eso sin costo, pues la hospitalidad del nativo lo hace sacrificarse por quienes les visitan.

Puede tomar la opción de ir en  las tardes a Puerto de Cuba a tomar un refrescante baño en la Ciénaga de la Mejía, o en la ciénaga de Caimito y si le gusta la adrenalina y sabe nadar, cruzar a nado el río San Jorge en las Guaduas. Si no le agrada nada de esto, puede quedarse jugando cartas, dominó, damas, parqué,  cucurubá o siglo en cualquier sitio donde haya alguien bajo la sombra de un árbol desarrollando esta actividad, pues usted puede “desafiar”, como se le denomina popularmente.

Si aun no ha estado satisfecho con todas estas actividades, pues le queda esperar el sábado de gloria, cuando los establecimientos de diversión abren sus puertas y nada mejor que disfrutar una cerveza bien helada en Puerto de Cuba o en la heladería de Lacho o si hay de fandango en Puerto de Cuba con la San Juan de Caimito, apuntarse a ese plan hasta el amanecer compartiendo con todos los coterráneos que llegaron de la ciudad al reencuentro en la tierrita que los vio nacer y recordar las costumbres de la semana santa.

Al finalizar la semana mayor con todas estas alternativas dadas, usted habrá quedado exhausto de reflexión, será más espiritual y comprensivo ó sencillamente habrá disfrutado del mayor descanso físico y mental que le ayudará a recargar baterías hasta Enero que regrese a las fiestas de Reyes y los nativos encantados de contar con su presencia.

Por la estadía no se preocupe, si no consigue habitación en los dos hoteles, algún nativo le albergará para que disfrute de su hospitalidad y del Remanso de Paz que es Caimito. ¡ TE ESPERAMOS !